Multitudinaria marcha en Bahía Blanca en defensa de la Educación Pública

Por Walter Calabrese

Los bahienses se sumaron al pedido que retumbó en todo el país pidiendo por el resguardo de las universidades nacionales. Este martes la Marcha Nacional Universitaria convocó a estudiantes, científicos, docentes y no docentes de la UNS, la UTN y la UPSO para hacer visible su descontento con las políticas de desfinanciamiento que viene aplicando el gobierno nacional sobre la ciencia, la cultura y la universidad pública.

La concentración se inició a las 17,30 horas en la esquina de 11 de Abril y avenida Alem, en el edificio de la UTN, desde donde se marchó hacia el playón de la Universidad Nacional del Sur, punto elegido para la lectura del documento nacional y la actuación de distintos artistas, junto al coro de la UNS. Los organizadores estiman que hubo más de 10.000 personas marchando por la ciudad.

Al frente de la columna se encontraban el rector de la UNS, Daniel Vega, el decano de la UTN, Alejandro Staffa y la rectora de la Universidad Provincial del Sudoeste (UPSO), Andrea Savoretti.

Estuvo también presente en la marcha el Intendente Federico Susbielles, quien más tarde se pronunció sobre la jornada en las redes sociales. Remarcó el compromiso de la ciudad en donde “una multitud se expresó en paz por la defensa de la educación pública y nuestro sistema universitario-científico”. Luego destacó que su “deseo es que seamos capaces de encontrar cada vez más puntos de coincidencia para construir un mejor futuro para todos”. Un día antes de la marcha, El Intendente Susbielles había difundido varios mensajes en apoyo a la educación pública en su red social X, asegurando que “Bahía Blanca es una ciudad que puede explicar la grandeza de su historia y las posibilidades de su futuro, fundamentalmente por la jerarquía y el prestigio de sus instituciones”. Además señaló que “nuestras universidades y el Conicet radicado en nuestra ciudad, sin lugar a dudas nos llenan de orgullo. Han formado -a lo largo del tiempo- no solamente profesionales de prestigio, sino también son un símbolo de la movilidad ascendente en la ciudad. Han logrado administrar los recursos del Estado con eficiencia, con eficacia, con método y profesionalidad”.

En sus comentarios continuó subrayando la importancia de resguardar nuestro sistema educativo: “Tenemos que comprometernos más que nunca con nuestras universidades y con el sistema científico de la Argentina, y entender que la educación pública es una de las llaves para construir una mejor ciudad, una mejor provincia y un mejor país”, añadió Susbielles.

En la semana, el Rector de la UNS, Daniel Vega, había invitado a toda la comunidad para ir en defensa de la educación pública y sobre todo del sector universitario. “Estamos atravesando una situación económica compleja”, afirmó Vega. También hizo un llamado de atención claro, señaló que “hoy no tenemos diálogo con el gobierno y eso nos preocupa”, porque la ciudad tiene un polo Científico Tecnológico, a «Bahía se conoce a nivel internacional por su universidad y eso tiene que ver con la ciencia y tecnología que se genera. Estamos convencidos que la única salida que tiene Argentina es con más conocimiento, educación, ciencia y tecnología», concluyó el rector.

En el documento que se leyó hacia el final de la marcha se hizo hincapié en la importancia del desarrollo científico, indicando que «la Argentina se ha caracterizado por ser una referencia de ciencia y tecnología en el mundo entero, dotado de desarrollos de punta y profesionales de excelencia al sector público y privado».

«La ciencia y la tecnología forman parte de la universidad pública, ya que la investigación es uno de sus pilares. Muchas investigadoras e investigadores no llegan a fin de mes y carecen de información cierta sobre la posibilidad de continuar con sus proyectos por los recortes en CONICET, así como en institutos dependientes de las universidades», se anunció.

«La ciencia y tecnología son aspectos sustanciales para la producción de soberanía, desarrollo y progreso. Un país que no invierte en ciencia, renuncia a la soberanía. El desfinanciamiento de la universidad y el sistema científico se va en desmedro de los reclamos objetivos de lograr el crecimiento económico», destacó el comunicado.

Y agregó: «Defendemos el acceso a la educación superior pública como un derecho. Creemos en la capacidad igualadora de la educación pública y gratuita, en el poder transformador de la universidad como formidable herramienta de movilidad social ascendente y en el aporte diferencial y sustantivo que la producción científica hace en la sociedad del conocimiento».

En ese sentido, el Rector Vega señaló que “tener universidades como las que tenemos en Bahía Blanca y la región es algo que se debe poner en valor. La UNS, la UTN y la UPSO forman un complejo universitario con una comunidad de más de 40 mil personas que dinamizan a la ciudad, internacionalizando a la ciudad y la región, generando oportunidades. Somos el único instrumento que genera movilidad social ascendente”. 

La situación de las universidades nacionales es crítica, el gobierno nacional ha cerrado el grifo y dejado sin recursos a las casas de estudio. Los números del presupuesto universitario de este año es el más bajo de la historia, con una caída interanual del 34,4 por ciento. Al respecto, la vicerrectora de la Universidad Nacional del Sur, Andrea Castellano, explicó que en la situación actual no se pueden pagar los gastos de funcionamiento de la institución, “hay un problema de fondo que pasa porque el presupuesto no fue aprobado por el Congreso. Al no tener presupuesto, dependemos del Poder Ejecutivo y los desembolsos que hagan”. Castellano detalló los números de la UNS: “Tenemos hoy 36.000 estudiantes en todas las carreras, más los preuniversitarios. Tuvimos un incremento del 20% en ingresantes con respecto al año pasado. Ha aumentado también la oferta de carreras, con 70 de grado y 65 de posgrado. Alrededor del 55% de nuestra matrícula se compone con gente de la región. La UNS es un emblema no solo de nuestra ciudad”.

La marcha que recorrió las ciudades más importantes del país no es un grito aislado, significa un límite expresado por un vasto sector de la sociedad, que reconoce el valor de la educación pública como instrumento para la movilidad social ascendente. Además, la clase media también se acercó a marchar, y ese no es un dato menor, puesto que es un actor destacado que ha recorrido las aulas de las universidades, su voz se multiplicó de manera apartidaria en todo el país junto a la de los docentes, sindicatos y otras organizaciones sociales.

En el final del documento que se leyó se remarcaba que “un país que no invierte en ciencia renuncia a su soberanía”. Y sin soberanía política somos rehenes de las corporaciones e intereses foráneos, porque se pierde la iniciativa para crear desde los recursos propios. Así, sin respaldo a la educación pública invalidamos el potencial de cada ciudadano para forjar su futuro.

La lógica que manejan los libertarios dista mucho del modelo educativo que ha permitido la conformación de una sociedad plural respaldada por un Estado presente. Por el contrario, lo que se busca desde el gobierno es la formación de meros consumidores, de ciudadanos sencillamente acríticos, de seguidores tozudos de las leyes del mercado. En ese esquema, resulta evidente que no les conviene que haya jóvenes con pensamiento crítico para hacer otra lectura de la realidad, incluso para verificar que han votado un modelo político que prefiere sostener una sociedad elitista, en la que se descarta a los que tienen menos recursos.

Afortunadamente, la sociedad se va levantando para decir no a tanto atropello y ajuste. La marcha masiva fue un límite político claro, es decir basta con argumentos contundentes, más de 1 millón de personas lo manifestaron a lo largo de la Nación.